1. Realizar como mínimo una asignatura de carácter híbrido o presencial en cada año del plan de estudios en ejecución, de tal forma que todos los y las estudiantes tengan la posibilidad de realizar actividades presenciales.
2. Si bien el mínimo es una asignatura por año, se recomienda incrementar el número de asignaturas en los primeros años y en el último año de formación.
3. Priorizar actividades de laboratorios, talleres prácticos, simulación, investigación y campos clínicos para las asignaturas mixtas o presenciales a realizar.
4. Utilizar toda la infraestructura disponible para la realización de las actividades híbridas o presenciales.
5. Coordinar la asignaturas y actividades a realizar, número de estudiantes asistentes y protocolos a utilizar el segundo semestre con la Vicerrectoría Académica. Lo anterior debe ser sistemático, para dar respuesta a la solicitud mensual de información por parte de la Superintendencia de Educación Superior.